
¿Quién ha sido autónomo? Yo he sido autónoma, y el primer mes que tienes que pagar tus gastos y no tienes ingresos entiendes ipso facto lo que significa «aportar valor al cliente». Esto significa que el cliente te pague por lo que tú sabes hacer.
En una empresa ocurre lo mismo. Si cada persona que trabaja en una empresa no sabe cuál es el valor que aporta al cliente, sobra. Porque no nos engañemos, quien paga nuestra nómina no es la empresa, sino el cliente que compra lo que nosotros hacemos. La empresa solo adelanta nuestro salario.
Desde que conocí el libro «Diseñando la propuesta de valor» en su versión en inglés en 2013, he aprendido bastante sobre la aplicación práctica de sus enseñanzas. Todos tenemos que vender nuestras ideas, nuestro trabajo. Los clientes también son nuestros jefes/as que aprueban o no la ejecución de esas ideas.
Los equipos auto-organizados cada vez toman más relevancia. Cada vez hay menos jerarquía. No basta con decir «eliminemos las jerarquías». Primero es necesario repartir más reponsabilidades entre los equipos. ¿Qué responsabilidades asume cada uno?. ¿Qué nivel de consciencia tienen las personas del equipo en relación a sí mismos, al equipo y al entorno en el que se desenvuelven?. Primero es necesario un desarrollo individual antes de asumir nuevas responsabilidades. Cuando ese desarrollo se realice, sobrarán muchos jefes/as.
Tal y como comenta Otto Scharmer, los desafíos a los que los líderes se enfrentan exigen ir más allá de la propia experiencia y aprender sobre el futuro a medida que va emergiendo, «darnos cuenta de lo que ocurre» y actuar en consecuencia.
¿Hasta dónde estás dispuesto/a a indagar para descubrir tu líder interior?