Incomprensión de las personas con altas capacidades y alta sensibilidad

A lo largo de mi vida he pasado diferentes crisis, pero la crisis que tuve en 2018 fue una verdadera crisis existencial, donde no sabía quién era ni cómo me llamaba. Esta crisis me llevó a contratar un mentor.

Durante el trabajo de mentoría existencial identificamos que soy una persona de altas capacidades. Me enseñó el libro de «Demasiado inteligente para ser feliz» y no podía creerme lo que estaba leyendo. Había una explicación documentada sobre la forma en la que mi mente funciona, y que, en demasiadas ocasiones, he sentido el rechazo por parte de otras personas de mi entorno por esa forma de funcionar.

Descubrir esto me llevó incluso a pedir presupuesto para hacerme las pruebas de diagnóstico en un centro especializado. El coste era de 400€. No las hice. ¿Para qué quería esa prueba? ¿Una prueba más para demostrar que tengo razón y los demás no? Paso ya de estas peleas infinitas por querer tener razón. Este tema «pelearme por demostrar que tengo razón» es otro de los temas que trabajamos durante la mentoría.

Unas pocas semanas después de terminar la mentoría, hablé con una gran amiga de São Paulo (Brasil) que es psicóloga, y me recomendó el libro de «El don de la Sensibilidad: Las personas altamente sensibles» de Elaine Aron. De nuevo al leer sobre las características que explica Elaine, me identifiqué con bastantes de ellas.

Por ejemplo, cómo sentimos el dolor es completamente diferente de una persona a otra. Algunas investigaciones ya lo están viendo y están investigando cómo seleccionar el mejor tratamiento.

En este sentido, haberme iniciado en Reiki Usui Tibetano nivel I y II me ha ayudado a minimizar el dolor y auto-equilibrarme.

Poco a poco me daba cuenta que no había nada malo en mí. Simplemente tengo una forma diferente de percibir mi entorno. Una forma que hasta 2018 nadie me había explicado, ni me había enseñado herramientas o métodos útiles para lidiar con ello. Me he sentido en muchas ocasiones como «un bicho raro». Y para nada soy ningún bicho, con todo el significado despectivo de la expresión.

Percibir tu entorno de forma diferente no es malo, es diferente. Solo necesitamos comprender y aceptar esta diferencia. Y en muchas ocasiones rechazamos la diferencia, por el motivo que sea, bien por miedo, inseguridad, envidia, celos, resentimiento, etc.

Entre todos/as creo que es muy necesario trabajar en entender e integrar las diferentes formas de percibir y de sentir nuestro entorno. Tal y como dice Alf Gauna, «el neocortex es como un receptor de radio que percibe un determinado rango de frecuencias». Cada persona necesita aprender a «sintonizar» correctamente su receptor.

¿La forma en la que percibes y sientes el mundo te supone una barrera de integración socialmente? ¿No consigues adaptarte a unas funciones consideradas como estándar o normales para ser “funcional” dentro de tu entorno?

Un comentario en “Incomprensión de las personas con altas capacidades y alta sensibilidad

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.